FAQ

Frequently Asked Questions

Radiocirugía

La radiocirugía es una forma de radioterapia. Tiene como particularidad ser extremadamente precisa.

Su objetivo es tratar tumores en el encéfalo y anomalías funcionales del cerebro que no pueden tratarse con cirugía ordinaria.

También se conoce con el nombre de radiocirugía estereotáxica y radiocirugía estereotáctica.

Aunque Radiocirugía contiene la palabra cirugía dentro de ella, no se trata de un procedimiento quirúrgico.

Precísamente es una alternativa para los pacientes que no pueden someterse a cirugía debido al lugar en el que se encuentra la lesión.

Ambos términos son usados de igual forma, aunque se sugiere utilizar únicamente la palabra estereotáctica en castellano

La radiocirugía requiere equipos de alta tecnología, con los que se administra radiación a la zona dañada con un margen de error mínimo.

En la actualidad, IRCA radiocirugía posee el sistema más avanzado de radiocirugía estereotáctica, la tecnología ZAP-X.

A diferencia de otras tecnologías, la tecnología ZAP-x es capaz de controlar en cada momento la dinámica de la irradiación, asegurando con mucha mayor efectividad no dañar las estructuras sanas que rodean la lesión.

Mediante la radiocirugía intracraneal se tratan una tipología de problemas cerebrales o intracraneales, entre ellos:

  • Tumores malignos de cerebro, cabeza y cuello
  • Lesiones benignas del cerebro como adenomas hipofisarios, neurinomas, meningiomas en fase temprana y metástasis
  • Patología neuro-psíquica como algunos tipos de epilepsia y neuralgias del trigémino

En un primer momento hay que localizar de manera inequívoca el lugar de la lesión mediante la determinación de las coordenadas exactas de dónde se encuentra.

Para ello se realizan pruebas de imagen estereotácticas de TAC (tomografía axial computerizada) y angiografía, complementado con resonancia magnética, para determinar exactamente la situación y tamaño de la lesión a tratar en el cerebro.

Una de las grandes ventajas de la tecnología ZAPx de la que disponemos en IRCA, es dejar atrás la clásica colocación del marco de estereotaxia.

Este marco consistía en un aro que se fija al cráneo con tornillos y que sirve de referencia para concentrar los haces de radiación en el lugar a tratar y estabilizar la cabeza.

Con la tecnología de la que disponemos en IRCA no es necesario clavar ningún dispositivo en la cabeza del paciente.

Con esto conseguimos eliminar los efectos desagradables que se derivaban al colocar el marco de estereotaxia tradicional alrededor de la cabeza:

  • No dejamos heridas puntiformes que dejan los clavos, por lo que no hay peligro de que se infecten.
  • Se evitan posibles dolores en los puntos de inserción de los clavos y también los de la presión que puede ejercer la fijación.
  • No se dan sensaciones de hormigueo que puede producir la anestesia.
  • Tampoco se producen otros no deseables efectos secundarios como hinchazón de párpados o de toda la cara como consecuencia de los clavos, porque en IRCA no utilizamos ese procedimiento.

El tratamiento es indoloro, ambulatorio y en un espacio diáfano con ventanas, lo que evita sensaciones claustrofóbicas.

Durante el tratamiento se aplican haces finos de radiación ionizante producidas a partir de cobalto desde multitud de entradas.

La ventaja de la tecnología de ZAPx que utilizamos en IRCA, es que es más avanzada que la bomba de cobalto tradicional, u otras como aceleradores de partículas, es que no requiere aislarse en las profundidades de un búnker, no necesita anestesia, no es doloroso ni invasivo. Y, además, en una sola sesión.

Con todo ello conseguimos humanizar todo el proceso.